La publicidad ha conseguido crear un concepto llamado efecto Axe, es decir, la atracción sexual de una mujer por un hombre que ha utilizado esta marca de desodorante. A pesar de las situaciones exageradas que los anuncios muestran, parece ser que algo de verdad hay, según un estudio realizado por Craig Roberts, profesor de la Universidad de Liverpool, y que es destacado por la revista Advertising Age.
Esta investigación reveló que los hombres que usaron Axe fueron vistos como más atractivos por las mujeres que aquellos que usaron un desodorante placebo, sin perfume. Los hombres con la fragancia Axe obtuvieron una media de 4,2 sobre una escala de 7 y los del placebo, 3,8.
Un dato importante a destacar es que las mujeres en ningún momento olieron a los hombres (35 veinteañeros heterosexuales), ya que el experimento se basó en vídeos de 15 segundos en los que cada uno se describía a sí mismo.
A las mujeres también se les ofreció imágenes de los hombres. El nivel de atractivo de los hombres con fragancia fue un 27% mayor en los vídeos que en las fotos.
Para Unilever, la clave del estudio está en la autoestima y la confianza en sí mismos que les proporciona Axe a los hombres: “El desodorante se supone que te hace sentir bien contigo mismo y te da confianza en el juego de los ligues, que es lo que Axe dice”, afirma en esta publicación Monica García, una científica de Unilever en Reino Unido.
Una advertencia: el efecto Axe se puede evaporar cuando el chico abre la boca. Las puntuaciones eran más altas cuando se suprímía sonido de los vídeos.
Esta investigación reveló que los hombres que usaron Axe fueron vistos como más atractivos por las mujeres que aquellos que usaron un desodorante placebo, sin perfume. Los hombres con la fragancia Axe obtuvieron una media de 4,2 sobre una escala de 7 y los del placebo, 3,8.
Un dato importante a destacar es que las mujeres en ningún momento olieron a los hombres (35 veinteañeros heterosexuales), ya que el experimento se basó en vídeos de 15 segundos en los que cada uno se describía a sí mismo.
A las mujeres también se les ofreció imágenes de los hombres. El nivel de atractivo de los hombres con fragancia fue un 27% mayor en los vídeos que en las fotos.
Para Unilever, la clave del estudio está en la autoestima y la confianza en sí mismos que les proporciona Axe a los hombres: “El desodorante se supone que te hace sentir bien contigo mismo y te da confianza en el juego de los ligues, que es lo que Axe dice”, afirma en esta publicación Monica García, una científica de Unilever en Reino Unido.
Una advertencia: el efecto Axe se puede evaporar cuando el chico abre la boca. Las puntuaciones eran más altas cuando se suprímía sonido de los vídeos.
Texto sacado de Anuncios.com en el artículo del pasado 9 de Enero
Algo que todos intuíamos, pero que ahora gracias al estudio ya podemos corroborar. La mente es la responsable de responder ante determinados estímulos publicitarios, como este. Está claro que la autoestima en tu casa, en al cuarto de baño, justo antes de salir de casa es la que te posibilita ciertas garantías de éxito en el ligoteo. Ahora lo que debe entender la gente es que esa autoestima la puede "suministrar" uno mismo sin necesidad de pagar más por un producto que te "da hecha" la autoestima.
Esto mismo respecto al ligue es perfectamente extrapolable a las decenas de situaciones que ocurren en nuestro día. "Puedes pagar más o puedes reflexionar" sería mi conclusión.
Pd: por cierto, muy bueno la advertencia. Aunque la mona se vista de seda,...